Tijuana.- Por décadas los gobiernos locales han intentado resolver el problema del manejo de los Residuos Sólidos Urbanos (RSU) mediante su recolección, transporte y confinamiento, pero a la fecha sigue siendo un servicio poco satisfactorio para la población. Como evidente resultado es visible la falta de servicio de recolección de la basura acumulada en barrancos y cañones que, al ser arrastrada por el agua provoca complicaciones y tragedias en la ciudad.
Ante esta situación, José Carmelo Zavala Álvarez director del Centro de Innovación y Gestión Ambiental (CIGA) hizo un llamado a las autoridades municipales y estatales a que se apeguen al Plan Nacional de Residuos que fue presentado el pasado 5 de diciembre por autoridades federales y con el que se plantea durante los últimos dos años de administración, se aplique la responsabilidad compartida entre los tres niveles de gobierno para gestionar de forma integral los RSU, a través del reciclaje, reutilización y la reducción de los mismos.
“Necesitamos alinear estas políticas públicas locales y cómo este plan nacional lo indica, separar este los Residuos Sólidos desde su origen. Hoy por hoy, no hay un gobierno en Baja California, que se haya atrevido y tenga el tamaño de la visión política de largo plazo para una política de separación de la basura”.
El ingeniero bioquímico reiteró uno de los principales retos, es la basura orgánica, que representa el 50% de la materia generada diariamente. Solo en Tijuana se producen mil toneladas al día; 500 en Mexicali y alrededor de 200 toneladas en Ensenada de restos de comida, poda y desechos agrícolas. El garantizar la separación de los desechos mantendría incluso más limpios los productos de plástico y metal, permitiendo así mantener su valor.
La materia orgánica bien procesada podría producir composta lista para complementar y nutrir los suelos que se desgastan con la urbanización. Por su parte en Mexicali, los residuos orgánicos podrían generar biodigestores cómo el metano; un gas natural renovable que hoy no es retenido en los rellenos sanitarios y es altamente contaminante si se escapa.
“La materia orgánica si llega al agua, ríos y lagos o el mar, para poder degradarse consumen oxígeno disuelto y entonces mata la vida en el agua, por eso es una falacia pensar que solo los no biodegradables generan contaminación: la materia orgánica también causa un problema en los cuerpos de agua”.
El reciclaje es elaborar un nuevo producto con estos materiales, no solo el almacenaje, por lo que la venta de plásticos acopiados a bajo costo le resta valor. Por otra parte, la basura electrónica es generada en Baja California por encima de la media, gracias a que el uso de productos de segunda mano es mucho más alto que en el resto del país.
El reto para Baja California es grande, por lo que urge que las autoridades de nivel municipal y estatal se coordinen y apliquen estas políticas públicas mediante estrategias bien organizadas y se avance en contrarrestar una problemática tan arraigada en la entidad.