Tijuana, 6 de septiembre.- Bajo el intenso sol y las temperaturas que alcanzaron los 29 grados centígrados, núcleos familiares de migrantes esperan hasta días para ingresar en un albergue, pues los 21 refugios de Tijuana están saturados.
En la calle Baja California de la Zona Norte, decenas de migrantes, la mayoría haitianos, esperan un espacio en el albergue Juventud 2000 que está rebasado en su capacidad, de acuerdo con su director, José María García Lara.
“Los albergues están llenos todos en Tijuana, ya que hay mucha comunidad de mexicanos, centroamericanos e incluyendo a la comunidad de afrodescendientes, en el albergue de Juventud 2000 estamos completamente llenos (…) Nos están diciendo que los están llevando a lugares disponibles del Centro Integrador, que fue hecho para atender estas necesidades”.
En la calle Galileo de la colonia Buena Vista, frente a la Casa Migrante Scalabrini, familias con mujeres embarazadas, niños y bebés, soportan el intenso calor de la ciudad.
Acceder a una cubeta de agua o un baño es difícil para la familia de Rafael, que durmió en la calle con su esposa y dos hijos de 3 y 2 años, menores afectados por el clima, por picaduras de moscos y quemados por los rayos del sol.
“Tenemos más de 24 horas esperando un espacio en un albergue (…) Les damos la más agua que se pueda y líquidos y los hidratamos como podemos”.
Mientras que familias de Centroamericanos señalaron que tienen días durmiendo en las calles y enfrentando dificultades pues no encuentran un espacio en albergues y no tienen como pagar una renta.
Abigail Girón Mejía señaló que su hijo de meses de nacido se enfermó por el calor, solo esperan encontrar un espacio donde dormir para su bebe y esposo; señalaron que acceder a agua para tomar e hidratarse es difícil y que tardaron 3 meses en llegar de Honduras a Tijuana.
“Tenemos dos días, pero hemos preguntado y nos dicen que no hay espacio, buscamos en otro albergue, ahorita como el niño se enfermó estamos esperando a ver si podemos entrar”.
Lynsi Adriana tiene 8 meses de embarazo y ha dormido en la calle son su hija de dos años y su esposo, señaló que salieron de Guatemala hace dos meses y no han podido encontrar espacio en un albergue-
«Se me ha hecho muy difícil por el embarazo, porque ya estoy en esta semana para dar a luz, fui a hospitales, pero me piden mucha papelería para que me atiendan y es complicado, fui a uno y me pidieron mis papeles, pero no tengo, fui a otro pero me dijeron que no atendían embarazos, yo no conozco Tijuana”.
Sobre la saturación de albergues en Tijuana, el delegado de programas federales Jesús Alejandro Ruiz Uribe, señaló que el Centro Integrador Carmen Serdán aumentó su capacidad de 200 a 300 migrantes y que la mayoría de los casos lo migrantes no quieren pernoctar en el albergue federal ubicado en la colonia Presidentes; aceptó que no existe un mecanismo para informar constantemente sobre este albergue.
“No te creas que a la gente le gusta estar mucho en albergue, es muy duro porque, aunque los tengamos de lujo, es dura la vida de un albergue porque no tiene la privacidad que se requiere, prefieren ellos estar una o dos semanas, consiguen trabajo y empiezan a rentar en la ciudad”, comentó.