Ana Lilia Ramírez
TIJUANA.— Una operación hormiga realizan delincuentes para traficar armas de Estados Unidos a Baja California y es que muchas armas son traficadas por partes, para después ensamblarlas en esta ciudad fronteriza y cometer delitos, señaló el Fiscal General Iván Carpio.
“Algo muy parecido una operación hormiga y terminan siendo ensamblados nuevamente en algún garage o en una casa y después son utilizadas para poder afectar a alguien y eso es algo que hemos detectado.”
Carpio Sánchez dijo que el traficarlas en partes a través de ‘operación hormiga’ complica conocer el origen porque no hay registro de estas en Estados Unidos o algunas son hechizas.
“A nosotros nos afecta para poder encontrar el origen y, buscar algunos otros participantes de los casos que nos tocan, es más bien un obstáculo más grande para las autoridades federales para poder buscar el origen de la venta estas armas bajo una perspectiva delito federal, pero también desde una óptica de cooperación binacional porque hay involucramiento de autoridades de los países”
Las armas que llegan a Baja California son extranjeras y monitorear su origen requiere mayor trabajo de cooperación binacional.
“Solamente con ver características (del arma) pues no son de origen nacional, son extranjeras. Las formas en que las ingresan, las fabrican y las venden, tienen algunos controles, pero cuando las compran en piezas, entonces los controles son distintos y cuando pasan de una primera a una segunda y luego de una segunda una tercera persona y luego de una tercera a una cuarta, entonces ya no hay un registro, porque se fue de mano en mano y si vienen de pieza por pieza”
Señaló que es una evolución de los grupos criminales para burlar los registros al comprar un arma en Estados Unidos.
“Han encontrado una forma de poder burlar esos registros que las autoridades como la ATF pudieran aspirará a tener, entiendo que ellos mejoran sus mecanismos de inteligencia e información y no colabora y nos contribuye cuando tenemos un caso”
Las armas, dijo, pueden cruzar por narcotuneles y zonas montañosas de la frontera para evitar las revisiones de las aduanas.
“No necesariamente afirmo que cruzan por la aduana y de ser así estarían fallando, podría ver desde luego muchas otras alternativas (…) Hay alternativas para cruzar por lugares que no son detectados, como pueden ser las zonas rurales donde no hay población o lo pueden hacer por los mismos narco-túneles que han sido asegurados, lo pueden utilizar de ir y de regreso, para el tráfico de sustancias ilícitas (a Estados Unidos) y de dinero y armas para atrás (a México).”